lunes, 15 de septiembre de 2008

Metro ring

Durante el viaje que hago en metro hacia mi lugar de trabajo ocurrió un hecho, que, al menos yo, no estoy acostumbrado a presenciar, resulta que antes de llegar a la estación Miguel Ángel de Quevedo, y con el vagón casi vacío, un par de tipos decidieron liarse a golpes, uno de ellos, muy moreno, calvo y ataviado con chamarra de piel, y el otro con traje azúl marino, camisa blanca y corbata roja, ambos fornidos, intercambiaban puñetazos como ojalá hubiéramos visto en las olimpiadas de Beijing; el que sacó la peor parte fue el trajeado que no alcanzaba a cabezear todos los golpes, recibiendo buena dosis en la cara, por supuesto, sangraba copiosamente, los pocos pasajeros nos asustamos y reculamos, incluso ya en la estación abandonamos el tren, pero no contamos con que los contendientes también salieron para seguirle en el andén, eso sí, el de traje, antes de salir, jaló la famosa palanca de emergencias; ya no hubo más acción y el sangrante se dirigió donde se encuentran los policías de la entrada, seguido por el enchamarrado, quien se iba sobando los puños, pero extrañamente tranquilo. A todo esto, sólo un señor tuvo el valor de intentar separarlos pero no fue exitoso el intento. En fin, seguimos con nuestro trayecto pero sí me quedé como siscado, no fue un bonito inicio de semana.

No hay comentarios: